El arquero Hugo Lloris sufrió una terrible lesión en la derrota del Tottenham por 3-0 ante el Brighton por la Premier League este domingo.

Desde el club informaron el mismo domingo que el portero se había dislocado el codo, por lo cual debió salir con oxígeno desde el campo de juego.

Este lunes confirmaron que afortunadamente la lesión no afectó los ligamentos, por lo que no será necesario una cirugía.

Sin embargo, se perderá lo que queda de 2019, ya que aseguran que el francés no volverá a los entrenamientos con sus compañeros este año.