Diego Armando Maradona volvió a Argentina. El exfutbolista y nombrado como uno de los mejores, si no el mejor de la historia, vuelve a dar que hablar.

El campeón del mundo en México 86 continúa con su carrera de director técnico, pero esta vez en su país. Hace unos días fue contratado por Gimnasia y Esgrima de la Plata, equipo que va en el último lugar de la Superliga Argentina.

Por ello es que el desafío de Diego es grande. Tras sus polémicas y problemas de salud, el otrora ‘10’ tiene un nuevo reto, y al otro lado de la cordillera tienen sus ojos puestos en él.

Ídolo del futbol mundial, Maradona siempre ha gozado del respeto y admiración de los demás. Tanto hinchas como rivales, siempre se rindieron ante el exgoleador. Excepto uno. Elías Ricardo Figueroa Brander, exseleccionado chileno y nombrado 3 veces como el mejor de América (1974, 1975, 1976).

‘Don Elías’ cosechó una gran carrera en la década de los 60’ y 70’, siendo pieza clave tanto de ‘La Roja’, como de sus clubes, donde logró marcar grandes hitos en Uruguay, Brasil y Chile, e incluso siendo considerado para defender la ‘Verdeamarela’ en alguna oportunidad.

Figueroa, reconocido como uno de los mejores centrales de la historia, también impuso respeto en el deporte. Y claro, a tal punto que en su época el mismo Franz Beckenbauer, campeón del mundo con Alemania, lo vio como un referente en defensa.

Maradona y Elías no se toparon muchas veces. Mientras el chileno vivía sus últimos años de carrera a principios de los 80, el argentino aún no llegada a su peak. Pero hubo un partido en el que lograron enfrentarse, el día en que el defensa no se achicó ante ‘D10S’.

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La Roja vs los Campeones del Mundo

En el año 1980 Chile se preparaba para las clasificatorias al Mundial de España 82, torneo al que ‘La Roja’ accedería finalmente. Para ello debían prepararse de buena manera y enfrentar a importantes rivales. ¿Y qué mejor contendor que el flamante campeón del mundo?

Un 18 de septiembre, y en plenas fiestas patrias, el equipo de Luis Santibáñez buscaría celebrar la ‘chilenidad’ en un partido ante un difícil rival: la selección Argentina, recientes monarcas del planeta tras su triunfo en la Copa Mundial del 78.

Los trasandinos eran comandados por el histórico Cesar Luis Menotti, y con un plantel con jugadores de primer nivel, como el central Daniel Pasarella, el portero Ubaldo Fillol y un joven pero prometedor Diego Armando Maradona.

Del lado visitante, Oscar Wirth, Patricio Yáñez y el mismo Figueroa destacaban en el ‘11’ inicial. El escenario del amistoso era Mendoza. Con cerca de 35.000 personas, ambas selecciones se enfrentaban, pero con un claro favoritismo para la ‘Albiceleste’.

Aún más cuando Daniel Valencia y Ramón Díaz dejaban 2-0 el partido en favor de los locales. Pero antes del descanso, ‘La Roja de Todos’ despertaría con el tanto de Osvaldo Vargas. Ya en la segunda etapa, el estadio de Mendoza se silenciaría con la espectacular chilena de Sandrino Castec. 2-2 terminaba el partido y con un meritorio empate de los chilenos ante los actuales campeones del mundo.

El ‘Pelusa’ vs ‘Don Elías’

Ya en el post partido, ocurría una curiosa anécdota entre las dos estrellas. Elías Figueroa, que en ese tiempo ya jugaba en Palestino, fue llamado por Diego Armando, jugador en ese año de Argentinos Juniors, el club que lo vio nacer.

Y es que la prominente estrella argentina quería intercambiar camisetas con el defensor chileno. En ese entonces, la figura de Figueroa era respetada en todo el mundo, oportunidad perfecta para que Diego le pidiera la número ‘3’ del exInter de Porto Alegre. Pero la situación no terminó como uno esperaría.

“Llega uno y me dice: Figueroa, Diego dice que quiere cambiar la camiseta con usted. Entonces digo: Que venga”, reveló hace unos días el mismo exfutbolista en una entrevista en Fox Sports Chile.

El mundialista en esa época no estaba para que lo llamaran, y es que fiel a su estilo y personalidad, el hombre conocido por el gol iluminado se quiso hacer respetar: “Y Diego dice: No, que venga él a mí. Estás loco, que venga él a mí, sino no”, le contestó el chileno. Finalmente ninguno se impuso al otro, y no cambiaron de camiseta.

Ya con los años, ambos no le darían importancia al momento: “Después nos encontramos en otras situaciones y nos reíamos”, concluyó Figueroa.

El tiempo pasó y a la postre el mediocampista se convertiría en el gran ídolo de Argentina. Sin embargo, nadie le podrá quitar a ‘Don Elías’ la astucia que tuvo aquella noche en Mendoza, cuando no se achicó ante un joven Diego Armando Maradona.