La Liga española ha decretado la expulsión durante tres temporadas de la competición profesional del Reus, de la segunda división, por salarios impagos a sus jugadores.
“El juez de disciplina social acuerda la expulsión temporal de tres año del Reus de la competición profesional y le impone una multa accesoria de 250.000 euros por el incumplimiento de los deberes adquiridos con sus futbolistas”, informó la Liga en un comunicado.
La decisión llega tras la reiterada falta de pago a los jugadores del club, que había motivado la apertura de un expediente sancionador por la Liga, concluido con esta expulsión.
Los impagos en los últimos meses habían hecho que varios jugadores abandonaran el club, que se había quedado apenas con cuatro fichas profesionales.
Los futbolistas quedan ahora libres para firmar por el equipo que eventualmente quiera contratarles.
No parece haber servido para cambiar las cosas la venta del club, que arrastra una deuda de cinco millones de euros, a dos inversores estadounidenses, anunciada hace una semana.
El juez considera que esta venta se produjo una vez producida la infracción por lo que “el saneamiento (presunto o real, total o parcial, creíble o no) de una entidad después de haber realizado el hecho infractor y haberse beneficiado de él no puede tener efectos enervadores de la sanción”.
De esta manera, el Reus no podrá jugar en primera ni segunda división durante las próximas tres temporadas, aunque el club tiene ahora quince días para recurrir ante el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD).