El portero del Liverpool, Loris Karius, fue el gran villano en la final de la Champions League ante el Real Madrid.
El alemán protagonizó dos errores que le costaron a los ‘reds’ la orejona.
Además de su rendimiento, el meta alemán recibió un feo codazo del defensa del Real Madrid Sergio Ramos, al minuto 49 de partido, cuando el marcador se mantenía 0-0.
Fue precisamente ese golpe el que preocupó a los médicos del Liverpool, quienes enviaron al meta a Estados Unidos a someterse a un TAC cerebral que descarte cualquier tipo de lesión, informó ESPN.
El medio agregó que el alemán viajó el pasado 31 de mayo a Boston por parte del club para que fuera atendido por el doctor Ross Zafonte en el Hospital General de Massachusetts.
Ahora, el recinto hospitalario emitió un comunicado donde explicaron los resultados de los exámenes.
“Hemos recibido numerosas llamadas hoy sobre el estado de salud del portero del Liverpool, Loris Karius. Con su permiso del Sr. Karius, proporcionamos información sobre su situación médica en un esfuerzo por evitar, en la medida de lo posible, la publicación de información incompleta o errónea”, comenzaron diciendo.
“El 31 de mayo de 2018, el Sr. Karius se sometió a un examen exhaustivo en el Hospital General de Massachusetts y el Hospital de Rehabilitación Spaulding. Después de revisar cuidadosamente las pruebas, hemos llegado a la conclusión de que el Sr. Karius sufrió una conmoción cerebral durante el partido el 26 de mayo de 2018″, agregaron.
“En el momento de nuestra evaluación, los principales síntomas del Sr. Karius sugirieron que existió una posible disfunción espacio-visual que probablemente se produjo tras el impacto. Es posible que tal déficit afectara al rendimiento”, añadieron.
“También notamos que el Sr. Karius ha mostrado una mejoría significativa y constante tras el episodio de conmoción cerebral, y esperamos que se recupere por completo en base a los resultados del examen. Esperamos que con el tratamiento y siguiendo los protocolos de actividad prescritos siga mejorando”, cerraron.
