El portero nacional, Claudio Bravo, se estrenó a lo grande en La Liga con una intervención espectacular, en el agónico triunfo de su equipo, el Real Betis, sobre el Deportivo Alavés.

El ex Manchester City se lució con una atajada en el inicio del segundo tiempo, demostrando que está más vigente que nunca.

A los 48′, y en un tiro de esquina, el argentino Rodrigo Battaglia ganó en lo alto y mandó un potente cabezazo, directo a la esquina del arco.

Pero Bravo apareció y contuvo el balón anda la mirada de sus compañeros. De hecho, el relator del partido tildó aquella intervención como un milagro.

Eso no fue todo, ya que en el rebote la pelota le quedó a un delantero del Alavés, quien quiso convertir, pero el meta nacional estiró las manos y lanzó el balón al tiro de esquina.