Claudio Bravo tuvo este miércoles un opaco regreso a la Champions League al ser expulsado a los 81 minutos en el empate 1-1 del Manchester City en su visita al Atalanta, en partido correspondiente al Grupo C de la Champions League 2019-2020.

El ex capitán de la ‘Roja’ entró a disputar el segundo tiempo en reemplazo del brasileño Ederson, quien terminó el primer lapso con molestias físicas, y solo cuatro minutos después de haber ingresado recibió el único gol de los italianos.

Además, cuando el duelo se iba en el San Siro, el de Viluco vio la cartulina roja al derribar como último recurso a Josip Ilicic. El árbitro entendió que no había ningún defensor en línea, de hecho lo revisó en el VAR y mantuvo su decisión.

La cuestionada decisión del juez del encuentro fue comentada en redes sociales. De hecho, el propio Bravo compartió la jugada en su cuenta de Twitter acompañada de un signo de interrogación.

Por otro lado, en la transmisión de Bein Sports el comentarista y exentrenador del Arsenal, Arsene Wenger, fue claro y señaló que Bravo no mereció ser expulsado, y que Ilicic debía recibir cartulina amarilla por haber simulado.

“El jugador de Atalanta debería haber recibido una tarjeta amarilla (por simulación)”. No era una tarjeta roja”, sentenció.