Nicolás Castillo no está contento con su rendimiento desde que volvió al fútbol mexicano. El delantero nacional no ha podido demostrar con goles lo que pagó el América por su regreso a tierras aztecas.

La noche de este miércoles se jugó un nuevo clásico del fútbol mexicano, esta vez en partido válido por la Copa MX. Si bien el conjunto del artillero formado en Universidad Católica avanzó a semifinales del certamen, Castillo no quedó muy contento luego de ser sustituido.

El atacante inició el partido como titular pero debió salir del campo de juego a los 61 minutos para que ingresara Henry Martin. En ese momento, las ‘aguilas’ vencían por 1-0 a su clásico rival.

Al llegar a la banca de América, Nicolás Castillo la emprendió contra una botella y luego con uno de los asientos del banquillo. Luego del encuentro, el delantero chileno explicó su molestia.

“No me siento precipitado o acelerado en la cancha. Salí enojado del partido porque no estoy en buen nivel”, reconoció un ofuscado Castillo.

“Estoy tranquilo. Tengo que seguir trabajando y esforzándome. Las cosas buenas van a llegar, lo sé. Uno se debe a esto, así que espero que todo empiece a andar mejor lo antes posible”, concluyó.

Finalmente el América ganó 2-0 y avanzó a la próxima fase. En semifinales del torneo, América deberá enfrentar a Xolos de Tijuana por un paso al partido final del certamen.