Una semana para el olvido ha tenido la actriz Daniela Nicolás, quien no sólo sufrió la perdida de un familiar, sino que también se vio envuelta en un escándalo por el que terminó recibiendo amenazas de muerte.

El fin de semana pasado falleció su abuelo materno y esta semana fue acusada de mantener un affaire con Mauricio Pinilla luego de un asado en TVN.

Esto habría llegado a oídos de la esposa de Pinilla, provocando que el deportista decidiera partir a Argentina, dejando en el camino a su equipo, la Universidad de Chile.

La actriz, sin embargo, desmintió categóricamente la información y afirmó que ni siquiera conoce al delantero.

“No puedo explicar lo que pasó porque no entiendo, yo ya no trabajaba en TVN en esa época, no estuve involucrada en esa fiesta. Lo único que me relacionó con él fue que lo entrevisté un par de veces en zona mixta cuando trabajaba en ESPN, al igual que a los demás futbolistas. Fue en marzo. Nada más”, sentenció en Las Últimas Noticias.

Según explicó, el enredo empezó cuando una cuenta parodia de Twitter (que ya no existe) lanzó el rumor que luego fue recogido por un medio de comunicación.

“He recibido unas faltas que no te imaginas, lo que te pueda decir ahora es nada para lo que me han escrito, es impresionante la agresividad de la gente ante un rumor que no tienen idea si es verdad. Por último espera a que salga una noticia donde diga sí, es verdad”, comentó.

“A raíz de nada me han escrito, me han agredido de una forma que no te puedas imaginar, o sea, hasta me han dicho que me van a matar”, añadió. “Me escribieron unos hinchas, que por mi culpa Pinilla se va y que iban a matarme. Así, impresionante”, agregó.

Daniela también aseguró que se considera una persona tranquila que sale muy poco, pero que es capaz de manejar la situación, no así, los hijos del futbolista. “Por último yo soy yo, le pongo el pecho a la balas, pero pienso en esos niños y encuentro fuerte, terrible”, reconoció.

“Ha sido una semana asquerosa. Perdí a mi abuelo también y tuve que viajar urgente a mi casa en Copiapó y regreso y me encuentro con esto. No estoy de humor. Y eso es lo peor porque la gente no tienen idea por lo que estoy pasando y creen que se pueden venir a reír de una, a burlarse e insultarte. No es no… No está bien. Te juro que nunca me había pasado y es impresionante. Ya no puedo más”, finalizó.