Las cifras económicas de los últimos meses alimentan la esperanza de una mirada “largoplacista” que devuelva un crecimiento cercano al 4%. Aunque el panorama es más favorable, persisten riesgos externos que podrían afectar la estabilidad de este repunte.

En paralelo, se anticipa una compleja discusión presupuestaria marcada por el déficit fiscal. Aún no se concretan recortes ni se reponen los fondos soberanos, lo se ha concentrado en un debate focalizado en quién debe asumir más responsabilidades.

Perspectivas económicas

Crecimiento potencial, crecer al 4%, más inversión, más empleo. Las ambiciones de los candidatos presidenciales y al mismo tiempo los desafíos que sortea el país en el corto y mediano plazo.

Con el Imacec de junio, de un 3,1% los economistas señalan que estamos en “un mejor pie” que 2024.

Emanoelle Santos, analista de mercados de XTB Latam, sostuvo que aunque esto podría ser un hecho, seguimos sujetos a la volatilidad de los mercados externos.

Ahora otro foco es el nivel de gasto y como se avecina una de las discusiones presupuestarias más difíciles del último tiempo, considerando el déficit fiscal.

En este sentido, nace la pregunta, ¿Se cumplirán las metas este año?

Juan Alberto Pizarro, presidente de la comisión tributaria del Colegio de Contadores, ve probable que ocurra lo mismo que el año pasado, considerando que los fondos soberanos no han sido restituidos, ni los recortes ejecutados.

Volviendo a la actividad, ojos están puestos en industrias como la minería, que han mostrado últimamente una baja en la productividad, pero también en mantener y diversificar las exportaciones.

Carlos Smith, docente investigador del Centro de Investigación de Empresa y Sociedad UDD, dijo que estamos en un punto clave.

En el gran empresariado, en tanto, mantienen el optimismo respecto de lo que son los “brotes verdes” que ha mostrado la actividad los últimos meses, aunque con especial énfasis en “subir la altura del debate”, respecto de la discusión técnica que debe darse en materia económica.