Este miércoles aparecieron nuevas declaraciones del serbio Novak Djokovic y su entrevista con la BBC, donde explicó la polémica situación que vivió en el Abierto de Australia y su negativa a vacunarse.

El tenista fue consultado por cómo vivió sus días en Australia, señalando que estaba rodeado de cámaras y helicópteros cada vez que entrenaba.

“Estuve libre durante cuatro días y estuve entrenando, pero no fueron días normales de entrenamiento que tendría antes de competir en un Grand Slam. Tuve helicópteros sobrevolando sobre mí en cada sesión de entrenamiento que tuve en la Rod Laver Arena. Cámaras por todos lados. Y también, mis colegas de profesión, me hicieron mucho daño”, dijo.

“Sentí esa energía y esas miradas de mis compañeros y gente que estaban en las instalaciones tenísticas, y obviamente, yo entiendo que ellos tienen una percepción que estaba basada en lo que habían visto desde los medios de comunicación. Pero yo no estaba capacitado para salir en los medios de comunicación por lo que previamente había dicho sobre el proceso legal y respecto al Open de Australia”, agregó.

“Definitivamente no fue algo placentero (estar en el hotel encerrado), pero no quiero sentarme aquí y quejarme sobre las condiciones en el centro de detención porque apenas estuve siete días. Me sentía impotente, cuando llegué allí, no me estaba permitido usar el teléfono durante tres horas. No pude dormir nada porque iba a ser interrogado cada 30 minutos, básicamente. Tuve muchos interrogatorios, empezaban, luego se detenían, después tenía que esperar a la persona que tenía que hablar con sus superiores. Luego al tiempo volvía. Fue durante una noche entera. La visa fue reestablecida, después revocada, luego reestablecida y más tarde revocada de nuevo”, añadió.