Con 34 años Alberto Abarza no deja de superarse día a día. A los 16 quedó en silla de ruedas debido al síndrome de Charcot-Marie Toth, el que se le manifestó a los dos años y que lo dejará prontamente sin poder caminar, algo que tiene más que asumido.

Pero Alberto es un ejemplo. Pese a este no tan alentador panorama, se dedica a ver el medio vaso lleno, el que quedó en evidencia en su entretenida conversación con Fernando González en el capítulo estreno de este viernes de “En el Set con Fernando”.

Con una sonrisa siempre a flor de piel el deportista de elite recorrió su vida, la llegada a la natación, sus campeonatos mundiales y el ser papá, entre muchos otros temas.

De su disciplina lanzó una potente frase, asegurando que en el único lugar donde se siente normal es dentro del agua.

Asimismo, destacó a la Teletón en todo su proceso y hasta le comentó al “Bombardero” el bullying que ha sufrido, reconociendo que ha sabido incorporarlo y que hasta su hija se lo hace sentir.

“El primer bullying me lo hace mi familia, mi hija, que me molesta para todos lados diciéndome que ella se cansa y yo no porque estoy sentando todo el día en la silla de ruedas”, confesó entre risas.

En cuanto a su legado, sostuvo que no le interesa ganar medallas ni dejar registros -se está luciendo en los Parapanamericanos de Lima, donde además fue el abanderado- aseverando que al final lo importante “es disfrutar y sonreír”.