La vida puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos, y eso bien lo sabe la tenista nacional Macarena Cabrillana, quien a los 16 años estuvo a punto de apagar su llama para siempre.
Una fuerte depresión desembocó en una decisión compleja: lanzarse desde el quinto piso de un edificio. Afortunadamente, la idea no se concretó como la chilena lo había planeado, pero que aún si dejó importantes consecuencias en ella y en toda su familia.
Un daño en la vértebra L3 de su espina dorsal fue parte del diagnostico inicial, el que con el paso de las horas fue categórico y desalentador: ya no volvería a caminar nunca más.
“Hasta ese entonces todo lo veía muy mal. No estaba pasando por un buen momento, no era feliz. Estaba con una depresión tremenda y eso me llevó a tirarme de un quinto piso e intentar suicidarme”, partió recordando Cabrillana en conversación con BiobioChile.
Para muchos el escenario sería más que gris. No obstante, Macarena prefirió no hundirse en la pena y tomar esta señal como una nueva oportunidad para vivir la vida.
Fue así como rápidamente decidió dar vuelta la página e ingresar a la Teletón, lugar en el que no solo cumplió con parte de su rehabilitación, sino que además, donde conoció la disciplina que le devolvió las ganas de sonreír: el tenis adaptado.
“Entre las herramientas de rehabilitación estaba el tenis. En un comienzo lo tomé porque solo me servía para ganar musculatura y más movilidad, pero poco a poco me fui motivando con el lindo de este deporte”, comentó la deportista, agregando que “Doris Gildemeister, hermana de Hans, vio desde la primera clase algo en mí y se encargó de entrenarme y pulir las aptitudes que ni yo sabía que tenía. Eso cambió mi vida en 180 grados”.
Un verdadero renacer
Pocos meses de entrenamiento le bastaron a ‘Maca’ para darse cuenta que a esto se quería dedicar por siempre. Es más, fue por esto mismo que comenzó a practicar con más frecuencia y mucho más esfuerzo, como sabiendo que lo mejor estaba a poco de venir.
Pese a que los primeros años no fueron para nada de sencillos, puesto que no solo debió aprender una nueva disciplina, sino que también a moverse desde una silla de ruedas, Cabrillana nunca se dio por vencida y en el año 2011 llegó su momento de triunfar.
Un torneo disputado en Brasil fue el escenario escogido para demostrar de qué estaba hecha, oportunidad en la que brilló con luz propia y subió su nombre, y el de nuestro país, hasta lo más alto del tenis continental.
“Ese campeonato fue mi primer evento en el extranjero. Lo recuerdo perfecto, ya que le gané a la brasileña que era mi referente en este deporte. Fue un tremendo partido y un tremendo logro para mí, lo que hizo que le demostrara a todos que sí tenía condiciones para esto y que si podía hacer cosas grandes”, añadió.
Complementando con que “hasta la fecha llevo 15 títulos en singles. Soy doble medallista de los Juegos ParaSudamericanos de Santiago, donde me quedé con un bronce en singles y un oro en dobles. Además soy dueña de la corona de los Súper Series del año 2016, que es uno de los torneos más importantes dentro del tenis adaptado”.
Eso sí, al igual que la vida de otros tantos deportistas de nuestro país, la carrera de la nacional no ha estado excepta de problemas. Una lesión en su codo derecho estuvo a punto de sacarla para siempre de las canchas, pero la fortaleza de la tenista criolla fue mucho más poderosa y sanadora.
“Se me cortó el tendón del Mango Rotador, por lo que debí operarme y estar varios meses fuera de las canchas. La rehabilitación fue lenta y compleja, lo que hizo que en ese tiempo perdiera rango y fuerza, y que me diera cuenta de que tras mi accidente, esto ha sido lo más complejo que he tenido que vivir”.
Desafíos en la mira
Sobre sus próximos desafíos, Cabrillana comentó que se está preparando para dos eventos en particular: uno en Francia y otro en República Checa. Ambos cerrarán su temporada 2018, la que por cierto, y en palabras de ella misma, ha sido totalmente fructífera.
Prueba de esto último son los títulos que pudo conseguir en el ATH Open de Bélgica, Rotterdam Open, Gustavo Kuerten de Brasil y Cañuelas Open de Argentina, los que la volvieron a posicionar en la orbe del tenis mundial.
“Después de lo que se viene en Europa pretendo tomarse algunas semanas de vacaciones para descansar y reflexionar sobre lo que será mi carrera en el año 2019”, enfatizó la especialista.
Macarena Cabrillana concluye señalando que “haré una gira por Estados Unidos en el mes de marzo, para luego volver a Chile y jugar el ITF 3 del Banco Chile. Tras esto, y ya junio, tenemos contemplado hacer una gira por Europa, la que me permitirá intentar llegar de la mejor forma a los Juegos Para Panamericanos de Lima 2019″.
