El suizo Roger Federer sumó este domingo en Stuttgart su 98º título de un torneo ATP tras batir al canadiense Milos Raonic en dos sets, 6-4, 7-6 (7/3), el día después de haber recuperado el número 1 del tenis mundial.

Tras casi tres meses de paréntesis competitivo durante la temporada de tierra, Federer, de 36 años, arrebató la corona del ranking ATP al español Rafael Nadal al clasificarse para la final del torneo alemán, que marcó su reaparición para la temporada de hierba.

Ganador de 20 títulos del Grand Slam, Federer dominó una final ajustada que concluyó con un tie-brak y justificó su estrategia, efectuada ya la pasada temporada, de tomar oxígeno durante la temporada de tierra, más exigente físicamente.

“Es un sentimiento maravilloso, he luchado mucho durante los últimos años”, se felicitó el suizo al término de su victoria, que, reconoció, “podría haber llegado antes” durante el partido. “Pero es necesario tener paciencia”, añadió.

Con este regreso retoma el pulso con Nadal, que viene de anotarse su undécimo Roland Garros.

Su juego del gato y el ratón en lo más alto del tenis mundial va a continuar durante las próximas semanas, con los torneos sobre hierba de Halle y sobre todo en Wimbledon (de 2 al 15 de julio), una superficie en la que Federer se siente más cómodo. Pero, del mismo modo, también se trata de los torneos donde tiene más qué perder.

Por ahora, a sus 36 años y 10 meses, el suizo se dispone a iniciar su semana 310ª de reinado mundial, 14 años después de su primer ascenso a lo más alto del ranking ATP. Esto fue el 2 de febrero del 2004.