El campeonato de tenis Futuro 5 de Talca está bajo la mira por apuestas “no razonables” en partidos de deportistas nacionales.

La sospecha recae luego de que la Unidad de Integridad del Tenis (TIU), organismo internacional destinado a luchar contra la corrupción en este deporte, comenzara a investigar desde hace un tiempo presuntos arreglos en juegos disputados en el país.

Dicho torneo, que finalizó el 4 de diciembre y que alzó a Nicolás Jarry como ganador tiene como sospechosos de realizar arreglos a los nacionales, Juan Carlos Sáez (614º) y a Ricardo Urzúa (940º).

No arriesgaré mi carrera por plata sucia“, dijo Sáez a El Mercurio, luego de conocer que su nombre es involucrado por la agencia de investigación polaca.

Recibimos una notificación de esta empresa, que hizo un seguimiento al Futuro 5 de Talca y, supuestamente, detectaron apuestas que no parecían razonables en partidos de singles de Juan Carlos Sáez y Ricardo Urzúa“, manifestó el timonel de la Federación del Tenis, Ulises Cerda.

La acusación es grave, sin embargo no hay abierta ninguna investigación oficial de parte del TIU, aclara el mismo presidente de la federación.

“De comprobarse que algún jugador nacional se involucró con estas mafias, vamos a ser drásticos y a aplicar todas las sanciones contempladas, al margen de las que aplique este ente, que tiene la potestad para hacerlo”, señaló.

Juan Carlos, que alcanzó la segunda ronda en este campeonato dice estar tranquilo, tras haber vuelto a competir luego de tres meses fuera a a raíz de una pubalgia.

Llegué a los Futuros casi sin entrenar, con un nivel que creo que no le ganaba a nadie, así que era lógico que pudiera perder con cualquiera“, remarca. “Si eso me convierte en sospechoso, que se muestren las pruebas”, expuso.

Según el tenista es fácil juzgar pero subraya: “Soy inocente“.

De momento el TIU realiza investigaciones en Colombia y España. A principios de este mes fueron detenidos 34 personas por arreglar partidos en el último país mencionado además de Portugal, por apuestas que abrían permitido ganar más de 350 millones de pesos chilenos a lo cabecillas de la organización.