La selección de rugby de Gales se proclamó campeona del Seis Naciones tras la victoria de Escocia ante Francia lograda este viernes en Saint-Denis (23-27) gracias a un try con el tiempo cumplido en el partido que quedaba pendiente para resolver el torneo.

Tras ganar hace seis días a los galeses por 32-30, el conjunto de Fabien Galthie llegó a este partido de la tercera jornada frente a Escocia (aplazado por la covid-19) con opciones matemáticas de lograr el título, aunque para ello necesitaba ganar con 21 puntos de ventaja y además obtener bonus por ensayos ante un equipo que este año fue capaz de ganar en Twickenham a Inglaterra (6-11) y que se propuso desde el inicio acabar el torneo a lo grande.

Consciente de sus necesidades, el XV del Gallo tardó poco en adelantarse en el marcador (3-0) gracias a un golpe de castigo anotado por Romain Ntamack a los ocho minutos.

Pero el sueño empezó a desvanecerse con un try de Duhan van der Merwe y la conversión de Finn Russell en el minuto 14. En tanto, a los 18 puso Rusell puso un 3-10 en el marcador del Stade de France.

Francia siguió apretando y consiguió dar la vuelta al electrónico con otro golpe de castigo de Ntamack (m.27) y un try de Brice Dulin. El marcador quedó 13-10 y se fueron al descanso.

Al poco de empezar la segunda parte (m.45) Francia volvió a soñar con la hazaña con un try de Damian Penaud que dejó el marcador 18-10.

Pero los escoceses consiguieron recuperar el mando con un golpe de castigo de Russell (m.52) y un ensayo de David Cherry transformado por el propio Russell (m.61), que acabó siendo expulsado a falta de 10 minutos.

Acto seguido Swan Rebbadj marcó otro try para Francia para poner el 23-20 para al menos tratar de despedirse del torneo con triunfo, pero los franceses poco más pudieron hacer ante un bravo equipo escocés que buscó hasta el último aliento su tercera victoria y que consiguió con el tiempo ya cumplido (m.85) gracias a un try de Duhan van der Merwe que premió la insistencia y la fe escocesa y que fue convertido por Adam Hastings para el definitivo 23-27.

De esta forma, el XV del Dragón galés logra el título dos años después de la última vez. Gales acaba el torneo con 20 puntos, fruto de cuatro victorias y una sola derrota, la que encajó frente a Francia (segunda al final con 16) y que le privó de su decimotercer Grand Slam en el Seis Naciones.