Jorge Martínez conquistó el premio de Quillón del RallyMobil, jornada que marcó el regreso de los fanáticos del motorsport a las pistas.

El piloto chileno Jorge Martínez y su navegante argentino Alberto Álvarez se adjudicaron la cuarta fecha del Copec RallyMobil, el Rally de Quillón.

El nueve veces campeón nacional tuvo una gran jornada de domingo en su Fabia R5, sabiendo administrar de buena manera los neumáticos para vencer en dos de los cinco especiales.

La experimentada dupla Martínez – Álvarez, que ahora se mete de lleno en la discusión por el título de la serie mayor RC2, completó los 376 km de rally con un crono de 1h24m33.6s.

Como escolta de los grandes ganadores se ubicó la tripulación local de Emilio Fernández y Juan Manuel Sanhueza, que, también a bordo de un Škoda Fabia R5 terminó su participación a 26.0s de la punta.

Los representantes del equipo Susaron ganaron las pruebas especiales 10 y 12. Finalmente, los argentinos Martín Scuncio y José Luis Díaz (Hyundai i20 R5) ocuparon el último escalón del podio, a 1m21.7s de los líderes. La dupla Scuncio – Díaz además se quedó con el tramo Mobil1 Powerstage.

Si bien el sábado se habían impuesto el piloto peruano Nicolás Fuchs y su navegante trasandino Fernando Mussano, en la Etapa 2 la tripulación del Škoda Fabia Rally2 Evo comenzó a sufrir con el desgaste de neumáticos, retrasándose cerca de medio minuto en la PE9 y abandonando definitivamente en el siguiente tramo de competencia, Domuco 1 (de 10.45 km) al salirse de la ruta.

Kovacs y su primer triunfo del año

En la división RC4 hubo también novedades, puesto que Patricio Muñoz y Miguel Recalt, que habían vencido el sábado y lideraban el domingo, debieron abandonar en la PE12 Domuco 2 al volcar en su Peugeot 208 Rally4.

El triunfo de la categoría de la tracción delantera se lo adjudicó así la dupla de Eduardo Kovacs y Sebastián Medrano (Peugeot 208 Rally4), que completó los 210,8 kilómetros de carrera pura en 1h40m55.4s.

Acompañaron en el podio a los ganadores los binomios conformados por Nicolás Pérez y Enrique Pérez (Peugeot 208 R2); y de Gerardo Rosselot y Álvaro León (Citroën DS3 R3), que cerraron a 1m33.9s y 1m43.2s, respectivamente.

El Rally de Quillón se convirtió en el ansiado retorno de los fanáticos a las rutas, quienes debieron cumplir con una serie de requisitos dispuestos por la autoridad y la organización Copec RallyMobil, entre ellos el de portar su Pase de Movilidad, utilizar mascarilla y cumplir con el distanciamiento social.