Los montañistas chilenos Galo Viguera y Felipe Bishara se salvaron de la muerte durante su ascenso hacia la cima del Manaslu, octava montaña más alta del mundo.

Los montañistas chilenos Felipe Bishara y Galo Viguera ‘convivieron’ con la muerte en su primera gran expedición al Himalaya. Una avalancha mortal y factores climáticos le impidieron ir por la cima del Manaslu.

Los deportistas afrontaron en septiembre pasado una interesante travesía a la octava montaña más alta del mundo, cuyo objetivo era ser la excursión más sustentable en la historia de nuestro país. La dupla nacional buscaba conquistar el macizo de Nepal con un estilo puro, minimalista y autónomo, que dejara la menor huella de carbono posible, sin utilizar helicópteros ni oxígeno suplementario.

Pese a llevar a cabo una larga preparación, de aproximadamente 10 meses, los atletas nacionales, miembros del Equipo Lippi, no pudieron cumplir con el asalto a la cima debido a las malas condiciones climáticas y una avalancha que dejó a dos personas muertas: un sherpa y Hillary Nelson, reconocida mundialmente por ser la primera mujer en hacer cumbre en dos ‘ochomiles’ (Everest y Lhotse).

En diálogo con BioBioChile, Bishara y Viguera relataron los problemas que debieron afrontar en la zona ubicada entre la India y el Tíbet. “Hay cosas ‘superiores’ que lo hacen a uno estar en el lugar correcto, en el momento correcto y hay que confiar. Todo comenzó por el 25 de septiembre cuando decidimos separarnos con Galo”, indicó de entrada Felipe Bishara.

“El 26 me dispongo a salir del campamento base para ir por el campamento IV (7.400 metros) y después de eso descender, todo de una tirada. Desperté más tarde de lo programado y cuando nos encontramos con Galo en el campamento II, 10 minutos antes, escuchamos por radio que hubo una avalancha entre el campamento IV y el III”, comentó.

“Entonces surgió la incertidumbre, ya que no sabíamos si habían fallecidos o lesionados, la cantidad de personas (…) Galo tenía pensado llegar al III ese día y yo pasar el III y tocar el IV. Una vez que llegamos al III nos encontramos con esta escena de gente lesionada, sherpas inquietos que buscaban abandonar a sus clientes para ir por sus colegas accidentados”, complementó.

Luego, vino la declaración más relevante. “Así, por algún hecho divino, no despierto a la hora que me correspondía, lo hice más tarde, y si hago los cálculos yo podría haber estado entre el campamento III y el IV al momento de la avalancha”, dijo Bishara.

El relato de Galo

En cuanto a la vivencia de Galo de este complicado momento, el deportista señaló que “no es muy diferente al de Felipe y fueron momentos difíciles. Ese día nos encontramos en el campo II con Felipe, subimos al III y allí nos encontramos con lo que había pasado”.

“Esto coincidió con la muerte de la famosa esquiadora norteamericana Hillary Nelson. Ella y su esposo hicieron cumbre y cuando bajaron esquiando, la señora hizo un mal movimiento, se desplazó con un poco de nieve -una mini avalancha- y cayó por el otro lado de la montaña a 2.000 metros. La encontraron varios días después en helicóptero”, expresó Viguera.

Para terminar el tema, el montañista señaló que “la avalancha no era solo nieve, era con pedazos de hielo, por eso dejó tanto accidentado con hemorragias internas y quebraduras. Las historias trágicas no terminan ahí, siguieron días después”.

Lo que dejó su paso por el Manaslu y los próximos desafíos

Por otro lado, los deportistas nacionales no dramatizaron ante la imposibilidad de llegar a los 8.163 metros de la montaña. Apuntaron que esto travesía terminó siendo igualmente una experiencia positiva, ya que fue más allá de lo deportivo.

“Personalmente, esto te cambia la vida. Conocer una cultura como es la nepalí, conocer a los sherpas y a las personas que habitan este país tienen un sentido de espiritualidad muy profundo y de vivir el presente demasiado diferente a lo que nosotros vivimos”, declaró Felipe Bishara.

“Nosotros básicamente (en Chile) estamos más enfocados al consumo, a medir tus ingresos. Allá con un buen karma, una buena energía, con un buen compañerismo, es todo lo que necesitan para vivir”, agregó.

En la misma línea apuntó que “si bien es un hito deportivo, también te cambia la vida el vivir la experiencia completa, tanto de la cultura, como conocer montañas de esta altitud y finalmente la fuerza y la voluntad que tenemos junto con Galo para embarcarnos en una aventura como esta”.

Consultado por si irán por una revancha, Bishara apuntó que “más que ello, estamos conscientes que la montaña habla, la supimos escuchar y regresamos. Hoy en día contamos con un ‘bichito’ de querer regresar a una experiencia como esta, pero personalmente buscaría otro tipo de montaña, conocer otra frontera, porque el Manaslu tiene secciones expuestas a avalanchas”.

“La revancha está por ir a otra montaña de 8 mil metros. Y quizás cuando las condiciones sean las correctas, volver al Manaslu, pero tenemos que conversarlo con Galo”, añadió.

Si bien los representantes del equipo Lippi no pudieron alcanzar el objetivo en esta ocasión, no descartan volver a intentarlo en el futuro. “El deporte es todo para mí. Ya tenemos planificados algunos proyectos para el próximo año, así que esto es solo el comienzo de nuestras carreras”, apuntó Viguera.