Mark Rapley, surfista australiano, salvó a su esposa del ataque de un tiburón a punta de golpes, luego de que el escualo mordiera la pierna de la mujer.

Como sacado de una película de ficción, el surfista australiano Mark Rapley salvó a su esposa del ataque de un tiburón a punta de golpes.

Ocurrió en en la playa de Port Macquarie, cuando Chantelle Doyle, la pareja del deportista, practicaba en el agua y él estaba en una orilla.

Según relató la mujer a 60 Minutes, sin aviso un tiburón blanco de tres metros la atacó mordiéndole su pierna derecha. Los gritos de dolor alertaron a Rapley, quien no dudó en lanzarse al agua para ayudar a su esposa.

El surfista comenzó a forcejear con el escualo y, en su desesperación, intentó golpearlo en la nariz. “Era la parte que estaba fuera del agua, así que empecé a darle puñetazos. Era como un muro de ladrillos”, comentó el hombre de 37 años.

Tras el forcejeo, el tiburón soltó la pierna de Doyle y pudo llegar la orilla ayudada por otros bañistas, quienes le dieron los primeros auxilios mientras llegaba una ambulancia.

“No puedo mover ni sentir mi pierna derecha. Me han dicho que tengo que esperar más de un año a que mis nervios crezcan para saber qué pasa”, detalló la mujer, quien afortunadamente vivió para contarlo.