La niña canadiense Rory van Ulft es considerada “la niña más fuerte del mundo”. Es campeona sub 11 y sub 13 en Estados Unidos, en la disciplina de powerlifting, tras levantar 80 kilos y ha abierto un debate por las exigencias a las que se expone.

Según replica el diario Clarín, es la primera vez que se levanta esa cantidad de peso en la categoría 30 kilos, lo que la convierte en una leyenda de la disciplina.

Su padre, que según especifican en su cuenta de Instagram le maneja las redes sociales, asegura que “Rory no solo es la niña de siete años más fuerte del mundo, sino que también es probablemente la niña o el niño de siete años más fuerte que jamás haya vivido, con resultados de competencia verificables”.

La canadiense empezó su carrera deportiva dedicándole mucho tiempo a la gimnasia, hasta que le recomendaron hacer ejercicios para fortalecer los músculos y así evitar posibles lesiones que podría tener en el futuro, hasta ese momento pensando en la gimnasia.

Pero la niña tomó el powerlifting como su disciplina por excelencia, llegando a romper varios récords a sus cortos 7 años.

Según exponen en el medio El Español, “El caso de Rory está sumido, por méritos propios, en muchos debates sociales. No solo en el uso que deben hacer los niños del deporte y de la competición, o del impacto que pueda suponer lo que practica para su desarrollo físico en el futuro, no deja de ser una niña de siete años levantando una cantidad enorme de peso, sino que también entra en juego el peligro de las redes sociales llevadas como un circo donde exhibir algo inusual”.