Una insólita modalidad en el combate de las artes marciales mixtas está siendo furor en Asia.

El sábado, en el evento URCC 77 celebrado en Manila, Filipinas, se dio un momento único de las MMA.

En vez de realizar un combate uno a uno, a los organizadores se les ocurrió llevar a cabo una pelea tres versus tres, con las mismas reglas de un enfrentamiento convencional.

En el caso de los árbitros, tambień se multiplicaron. Habían tres de ellos para seguir de forma más personalizada cada pelea.

Los peleadores podían atacar a cualquiera de sus rivales, pero no debían descuidar su defensa.

Fue así como tres filipinos (guantes rojos) versus tres chinos (guantes azules), se enfrentaron en un combate que dio como ganador a los locales, por decisión de los jueces.