Kelly Catlin, deportista estadounidense de 23 años y campeona mundial de ciclismo de persecución, fue hallada muerta en su casa el pasado fin de semana.

El fallecimiento de la atleta, medallista olímpica en Río 2016, fue confirmado por la Federación de Ciclismo de Estados Unidos.

“La comunidad ciclista estadounidense ha sufrido una pérdida devastadora con la muerte de Kelly Catlin, miembro del equipo nacional”, lamentó el presidente del ente, Rob DeMartini.

La oriunda de Minesota fue encontrada sin vida en su casa de California y, según contó a Velo News su padre, Mark Catlin, su familia está con un dolor increíble.

“No pasa un minuto sin que piense en ella y en la vida maravillosa que podía haber tenido. No pasa un segundo en que no pensemos que daríamos nuestras vidas a cambio de la de ella”, declaró Mark.

Mientras, el hermano de la deportista, Colin Catlin, detalló que “ella es la única persona con la que he compartido casi toda mi vida y la extrañaré terriblemente”.

Por su parte, el equipo de ciclismo estadounidense describió a la malograda atleta como “una persona que tenía el mismo talento para andar sobre la bicicleta, para seguir música, arte y un título de posgrado en matemáticas computacionales de la Universidad de Stanford”.

Kelly, que además estudiaba ingeniería informática en la Universidad de Stanford y tocaba violín, era considerada una de las grandes figuras del ciclismo en pista. Prueba de ello son sus tres títulos mundiales (2016, 2017 y 2018) y su medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Río 2016.