Carlos Machado es un deportista argentino que podría ser como cualquier otro exitoso representante de dicho país. No obstante, la vida se ha encargado de ponerlo a prueba en un sinfín de oportunidades, de las que ha debido salir airoso para ser hoy lo que es: un gran exponente del Muay thai trasandino.

Hasta allí ningún novedad, pondrían pensar algunos de ustedes. Sin embargo, lo que no saben es que Machado ha logrado posicionarse dentro de la disciplina, aún cuando pelea con un solo brazo.

Sí, como lo lee. El argentino que perdió su extremidad derecha a causa de un tumor maligno cuando tenía tan solo tres años de edad, se hace respetar dentro del ring, peleando como cualquier otro. Sin ninguna diferencia, sin ninguna ventaja y bajo las mismas reglas.

“Estaba justo abajo del hombro, en la clavícula. El bulto salía abajo de la axila. Yo era muy chico y me acuerdo poco y nada de cuando tenía el brazo”, partió recordando el luchador en conversación con el medio El Clarín.

La situación fue difícil, pero ‘Charly’ nunca se rindió. Y es que su amor y ganas de practicar algún deporte eran tan grandes, que no dudó en buscar una que disciplina que se pudiera acomodar a sus nuevos requerimientos.

Fue así como a los 15 años de edad se encontró con el kick boxing, el que después de un tiempo cambió para quedarse definitivamente con el Muay thai. Y bueno, con este último solo ha sabido de alegrías, luciendo con el máximo de los orgullos los siete invictos que posee, así como el cupo que ganó para disputar el XXIX Campeonato Sudamericano de Ecuador, el que se realizará el 21 y 22 de septiembre próximo.

“No hay que enseñarle nada, es una bestia”. Siempre digo que quizá no tendría la habilidad que tiene. Lo digo por decir, pero realmente es un talento natural”, comentó Leonardo Sosa, quien es amigo y entrenador del trasandino.

Crédito: El Clarín / Sitio Oficial
Crédito: El Clarín / Sitio Oficial

Pero, ¿cómo es que a pesar de tener una sola extremidad ha podido posicionarse dentro de un deporte que se caracteriza por la utilización completa del cuerpo? La respuesta es fácil: entrena el doble de lo que entrenaría cualquier otro deportista.

“Trato de tensar más las peleas y así voy compensando. Pego bastante fuerte, es una de mis habilidades. Ya me acostumbré a mi condición desde la infancia y soy más de contragolpear”, indicó Machado.

Complementando con que “en muay thai me cuesta un poco más en el clinch (agarres), la pelea en corta distancia, y es lo que más entreno para sentirme cómodo”.

Y de seguro es esto mismo lo que ha cautivado a todos lo que integran la Academia Marcial Escuela (AME) de Argentina, quienes ya ven al joven boxeador como una gran fuente de inspiración.

“La verdad que sí, es más difícil que pelear. Lo bueno es que trato de resolver las cosas con tranquilidad. Tengo siempre un compañero que me ayuda. A veces se complica, pero sólo tengo que pensar un poco más”, explicó el peleador.

Concluyendo con que entre sus objetivos a largo plazo se encuentra el de “llegar a competir profesionalmente, que no haya ningún problema y que pueda hacerlo. Con perseverancia todo se puede en la vida, nada es un obstáculo”.