El Consejo de Estado francés confirmó la suspensión por un año del boxeador francés Tony Yoka, campeón olímpico de los superpesados en Rio 2016, por sus repetidas faltas a su obligación de estar localizado para controles antidopaje.

Yoka había anunciado que respetaría esta decisión, que confirma la sanción infligida en junio por la Agencia francesa de lucha contra el dopaje.

El púgil no podrá pelear hasta julio de 2019.

El boxeador de 26 años está acusado de no haber cumplido en tres ocasiones en menos de un año con su obligación de estar localizado para controles, algo que deben hacer todos los deportistas de alto nivel.