En un gimnasio situado a las afueras de Puerto Varas se puede ver al excampeón mundial de boxeo peso crucero (Asociación Internacional de Boxeo), Carlos Cruzat, moviéndose de lado a lado.

¿La razón? un proyecto deportivo que tiene como objetivo formar a futuros púgiles, además de intentar devolverle a Chile su lugar en el boxeo internacional.

700 metros cuadrados, 12 punching ball, un cuadrilátero y 40 integrantes son parte del equipo que es posible encontrar en el Carlos Cruzat Boxing Club, el proyecto que trajo al exdeportista de vuelta a la disciplina.

“Para mi significa un retorno a la actividad. Viajando mucho decidí venirme a Puerto Varas, porque siempre había soñado con armar mi propia escuela en el sur”, partió indicando el exboxeador chileno en conversación con El Llanquihue.

Agregando que “la idea de contar con esta casa es para trabajar con jóvenes, formar figuras y masificar este deporte. Nuestras puertas están abiertas para que se integren y preparen con los medios que contamos”.

Sobre sus próximos desafíos, Cruzat indicó que este próximo 7 de julio tendrán una jornada de sparring, la que contará con la presencia de su talentoso sobrino, Junior Cruzat, así con la de Jordy Pérez, quienes practicarán y le enseñarán parte del deporte a los nuevos pupilos.