Pese a los esfuerzos y peticiones de las autoridades rusas, la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) fue clara: se mantiene la suspensión por dopaje institucionalizado a Rusia.

La decisión se conoció días antes de la reunión que llevará a cabo la Comisión Ejecutiva del Comité Olímpico Internacional, en la que se conocerá si Rusia podrá asistir o no a los Juegos de Invierno, que se celebrarán entre el 9 y el 25 de febrero próximo en Pyeongchang.

“Algunas de las condiciones para la rehabilitación de Rusia fueron cumplidas, pero otros criterios aún no, como la rehabilitación de la Agencia Antidopaje rusa como agencia antidopaje independiente y el reconocimiento por las autoridades rusas de las conclusiones del Informe McLaren de un dopaje institucionalizado“, indicó Rune Andersen, según pudo constatar Eco Diario.

Andersen agregó de manera enfática que “mientras no se admita lo que ocurrió, no estaremos convencidos que de no volverá a pasar”.

Cabe recordar que el atletismo de este país no ha estado presente en competencias oficiales desde noviembre del año 2015. Y es que si bien algunos atletas han podido competir bajo bandera neutral en competencias internacionales, esa cantidad solo asciende a 19 deportistas, muy distante de la cantidad total de atletas que contempla la federación rusa.

Por último, cabe mencionar que la IAAF abrió sus puertas para que los atletas pudieses demostrar cuáles eran sus métodos de entrenamiento y que estos no tenían nada que ver con el sistema de dopaje institucionalizado del cual se les acusa.