Un hecho inesperado se vivió en la Liga Mayor de Béisbol (MLB, en su sigla en inglés). Esto, luego un jugador fue capaz de quebrantar la tecnología de la NASA tras batear la bola de juego tan fuerte que golpeó, por partida doble, el techo del estadio que fue diseñado para no ser alcanzado por un jugador.

Se trata de Aaron Judge, quien luego de esta hazaña se postula como el candidato a adjudicarse el premio al novato del año de la MLB.

Judge tiene 25 años, pesa 128 kilos y mide 2,01 metros de altura. No obstante, esto no fue lo que llamó la atención en el juego recién pasado, sino el hecho de que el bateador haya enviado una bola de juego al techo del reciento superando los 193 kilómetros por hora, adjuntándose con ello el récord al envío más veloz de la temporada así como en el que más lejos a llegado.

Eso sí, esto no fue lo único que generó comentarios, puesto el evento se llevó a cabo en el estadio de los Florida Marlins, el mismo que se diseñó en colaboración con especialistas de la NASA y que se construyó de tal manera que ningún bateador pudiera impactar el techo del mismo.

Según se detalló, al momento de la construcción del estadio los especialistas concluyeron que el techo debía estar a 64 metros en su punto más alto, mientras que para las otras zonas solo bastarían 40 metros, cálculos que eliminaban toda probabilidad de que alguien alcanzará la cima de él.

A pesar de esto y ante toda posibilidad, Aaron envió los cálculos a la basura y realizó la hazaña por partida doble, lo cual no solo lo convirtió en la nueva sensación del béisbol norteamericano, sino que también lo tienen en el ojo de todos los clubes.