El delantero Mauricio Pinilla evidenció su molestia con la dirigencia de Azul Azul, en el marco de la disputa legal que mantiene tras su conflictiva salida de Universidad de Chile.

En conversación con El Mercurio, Pinilla se refirió al periodo complejo que enfrenta, asegurando que “ha sido muy complicado y bastante angustiante, sobre todo para mi familia. Enfrentamos esto con mucha humildad y fortaleza, porque la exposición mediática me ha puesto como el malo de esta historia y la realidad es totalmente distinta a lo que han querido hacer creer”.

Para el delantero, en Azul Azul actuaron de ‘mala fe’ cuando se anunció su salida del club. “Después de firmar ese documento, la cesión de derechos (a Colón) de la que se habla, se dejaba claro en el escrito que yo seguía bajo contrato con la Universidad de Chile. Por eso se firmó ese documento, porque no había un acuerdo ni un contrato ni un finiquito (…) Una cesión de derechos va amarrada a dos cosas fundamentales: la firma de un finiquito y de un contrato de trabajo. Yo al firmarlo en uno de los puntos, que leí atentamente, dice claramente que seguía bajo contrato con la U. Yo no firmé nada con Colón, se firmaron los derechos, pero nunca una propuesta con las condiciones definidas”.

El atacante apunta que el arribo a Colón se frustró porque “nos dimos cuenta que la propuesta era falsa y dijimos que la negociación no iba y lo dejamos hasta ahí. Nunca firmamos nada con Colón”, para luego aclarar que se debió a que “me querían obligar a cometer delito tributario, lo cual nunca he hecho en mi carrera. Los detalles de la negociación son parte del juicio, pero yo no me iba a ir a un país en el cual mi contrato no fuera legal o que me obligara a cometer delito, no iba a exponer a mi familia a algo así. Yo no había visto casa, colegio ni nada, mi logística está armada acá en Chile, nunca pensé en dejar Chile”.

“El anuncio apresurado que hace Azul Azul es el fiel reflejo de lo que pasa hoy en el club: el mal manejo de esa sociedad anónima. La Universidad de Chile la hace grande su hinchada y su gente, no ellos” arremetió Pinilla, quien enjuicia la labor de Ronald Fuentes, ya que “acá hay un sinnúmero de cosas que pasaron cuando estuve en la U. Desde la ‘guerra’ que le hizo el gerente deportivo a Guillermo Hoyos, con quien yo tenía una excelente relación. Eso también los complicó. Jamás había visto, en toda mi carrera, un manejo tan poco profesional de un club tan grande como la U. El club no se maneja como el equipo grande que es“.

Sobre el trabajo de la dupla de Fuentes y el presidente del directorio y máximo accionista, Carlos Heller, Pinilla sostiene que “el mal manejo de la gerencia deportiva y el mal manejo de Azul Azul se refleja en la cancha y eso no lo mejora el entrenador. Con la amistad no se ganan partidos. De que hay que hacer cambios, hay que hacerlos. Pasé a ser un enemigo por defender los derechos de mis compañeros. Nunca exigí nada, sí pedía que se hicieran las cosas a nivel profesional, lo que no pasa en la U”.

Como ejemplo, el futbolista expone que “muchas veces me sentí desprotegido y ahora terminó en esto. Esta ha sido la peor experiencia de mi vida. Ensuciaron mi imagen. Al ‘brillante’ de Ronald Fuentes se le ocurrió un día cobrarnos los zapatos de los trajes que nos mandaron a hacer. A mí no me molestaba, pero cobrárselos a los chicos que ganan 350 o 400 mil pesos… Llegar a una habitación en la concentración a las 15 horas y que recién cuatro horas después llegara el agua, porque abarataban costos, qué te dice eso. Te habla de un manejo pésimo. Son muchos detalles que hacen que la U no funcione como un equipo grande”.

Respecto a su vínculo con Heller, sostiene que “tenía una excelente relación con él, hasta que pasó esto y nunca más tuvimos comunicación. Me escribía antes de los partidos y luego de esto desapareció. El club y el técnico nunca se negaron a que me fuera, nunca me dijeron que me quedara. Hablé con (Frank) Kudelka y en ningún momento me pidió que siguiera. Seguramente estaba alineado con lo que quería la institución. La predisposición de ellos era que yo abandonara el club y eso lo sentí”.

Por último, junto con desmentir que la oferta de Colón fuera usada para conseguir un mejor sueldo, ya que había renovado su contrato con la ‘U’ un mes antes, Pinilla respondió sobre si la movida de la directiva azul fue buscando reducir gastos. “En perspectiva, es una muy mala estrategia tratar de abaratar costos de esta forma, si así lo pensaron. Yo no vine a Chile a hacerme rico, porque para venir a la ‘U’ renuncié a más de 1,2 millones de euros que me ofrecían en Italia y si me quise venir, fue por amor a la ‘U’. Rebajé mi contrato para volver (…) Sí, mi intención, en un principio, era retirarme en la U y firmar por dos años, pero acepté firmar por uno, bajo las condiciones que puso la ‘U’. Cuando llegó la propuesta de Colón había muchas variables para analizar, pero nunca se aceptó”.