En San Carlos de Apoquindo el ambiente actualmente no es el mejor. Tras tres años dominando el balompié chileno casi sin contrapeso, Universidad Católica marcha cuarta en el torneo nacional, exhibiendo su peor versión futbolística.

Los ‘cruzados’ no han logrado consolidarse desde el arribo del entrenador uruguayo Gustavo Poyet, cuyo desempeño se ha visto marcado por un inesperado quiebre entre cuerpo técnico y jugadores.

Los mismos futbolistas han reconocido algunas diferencias con el estratega en el último tiempo, sin esconder que han existido conversaciones y situaciones complicadas.

La prohibición de una cábala

Los líos internos en el equipo precordillerano se iniciaron luego de una drástica determinación del director técnico.

En específico, el DT impidió a sus futbolistas que continuarán con una cábala que se arrastraba desde hace varias temporadas: la ‘foto’ grupal en el camarín después de cada triunfo.

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Cruzados

Así lo admitieron desde la interna de la UC a diario El Mercurio. “Es un detalle, claro, no tiene nada que ver con lo que ha pasado en la cancha. Pero fue algo que de entrada nos chocó y fue generando los primeros roces con el técnico”.

De ahí en más las cosas se fueron complicando poco a poco. En el primer equipo ‘cruzado’ tampoco olvidan una dura reprimenda de Poyet tras la vuelta ante Palmeiras en Copa Libertadores, añadieron a la misma publicación.

“Habló fuerte, duro, nos criticó mucho… Tuvieron que salir los referentes a pararlo”, admitieron.

Por si fuera poco, Diego Poyet, hijo y ayudante técnico de Gustavo, ha tenido encontrones con referentes como Edson Puch y Fernando Zampedri durante entrenamientos.

“Yo soy antiguo en esto. Pido disculpas, pero de lo que pasa en la interna yo no comento nada. Yo tengo códigos que aprendí de chiquito en Uruguay”, dijo Gustavo cuando fue consultado por esos incidentes.

“Pido mil disculpas pero de lo que pasa en el vestuario… jamás cuento nada. Quizás con amigos en un asado, pero no públicamente”, añadió el DT.

El ambiente en San Carlos es tenso. Justo en la previa del retorno de hinchas a la precordillera. La UC recibe a Everton este domingo y no son pocos los que creen que la fanaticada se hará sentir contra el entrenador.