El entrenador de Universidad Católica, Gustavo Quinteros, manifestó su tristeza por no poder darle “una alegría a la gente” en la Copa Sudamericana 2019, tras concretarse la eliminación del cuadro cruzado pese a ganar por 3-2 a Independiente del Valle en la revancha de la segunda fase.

El elenco de la franja pagó demasiado cara su derrota de 5-0 sufrida la semana pasada en la ida, en Quito, donde en los primeros 20 minutos de juego ya tenía encajados cuatro tantos. Finalmente, el equipo ecuatoriano estructuró un marcador de 7-3 en el global.

Al momento del análisis, el estratega del campeón chileno declaró que “fue un partido en el cual el equipo mostró la mayoría del tiempo superioridad sobre el rival, que era lo que buscábamos. Era demostrarnos que el equipo es mejor a lo que mostró en Ecuador. El primer objetivo era ese”.

“Me quedó con una sensación amarga porque nos hacen goles muy rápido, en Ecuador y acá también. Son cosas que no esperas, te bajan el estado de ánimo, pero los jugadores buscaron el resultado y lo consiguieron. Queda la sensación de haber hecho algo mejor de visitante. Quedamos en deuda con la gente. Estamos tristes por no darle una alegría a la gente, que merecía algo mejor. Hemos conseguido una parte, que fue jugar mejor que el rival”, complementó, apuntando a los problemas que enfrenta el equipo como forastero.

Además, el técnico de origen argentino expresó que “el mensaje fue ganar el partido (…) Creo que se aprende para lo que viene. Lo que tenemos que hacer después de quedar fuera de las copas es ir por el campeonato, tratar de clasificar para la Libertadores y que el próximo año tengamos otra forma de plantear los partidos”.

Para finalizar, Quinteros admitió que “no hicimos el fútbol que Católica puede. Tenemos que aprender de lo que hemos fallado. Estamos en deuda con nosotros y con la gente (…) Ahora nos queda el objetivo del campeonato y la Copa Chile”.