Con una victoria de 2-0 ante Rusia, La Roja celebró en su primer partido de la fecha FIFA de noviembre, en Sochi, volviendo a sonreír tras terminar en el último lugar las Eliminatorias al Mundial 2026.
El seleccionador de Rusia, Valeri Karpin, fue claro al identificar lo que consideró la principal diferencia entre Chile y Perú, dos equipos sudamericanos que los eslavos enfrentaron en esta ventana internacional.
“La diferencia estuvo en la organización. El equipo chileno parece más organizado y disciplinado“, aseguró el DT, dejando en evidencia su admiración por el rendimiento del combinado nacional.
Cabe recordar que Rusia había igualado 1-1 con Perú días antes, en un encuentro que dejó que desear en términos de espectáculo y emociones.
En palabras del propio Karpin, el rendimiento del equipo ruso en ese partido fue opacado por la falta de atrevimiento del juego peruano. “Me gustó más el partido con Chile. Se notó en todo, permitimos dos tiros a puerta y concedimos dos goles. Fuimos más interesantes en ataque que en el partido contra Perú“, añadió.
De esta manera, el exfutbolista y seleccionado vio en Chile un rival mucho más desafiante. Este martes 18, La Roja se medirá a los peruanos en Sochi, en el Clásico del Pacífico.
En Perú reaccionan a los dichos del DT de Rusia
Las declaraciones de Karpin no pasaron desapercibidas en el país vecino. “DT de Rusia generó polémica con comparación entre la selección de Chile y Perú“, tituló El Libero.
“Las palabras de Valeri Karpin, técnico de Rusia, ven a Chile como un equipo superior al peruano, dejando en claro que el país dirigido por Nicolás Córdova posee mayor técnica, es tácticamente superior y, sobre todo, cumplen con las indicaciones de su técnico en el campo”, complementó.
“A la vez, se dio espacio para realizar una comparación contundente entre la selección peruana y la chilena, resaltando a Chile por sus mejores condiciones en el campo”, finalizó.
Bolavip Perú, en tanto, indicó que “esta actitud de Karpin, de eludir responsabilidades y menospreciar a sus oponentes, es un acto de soberbia que socava la ‘planificación absoluta’ que él mismo defiende“.