El entrenador de la selección chilena Sub 17, Hernán Caputto, exteriorizó su felicidad por alcanzar con el combinado la clasificación al Mundial de la categoría ‘Brasil 2019’, luego de un gran triunfo por 4-2 sobre su similar de Uruguay por el hexagonal del Sudamericano.

La ‘Roja’ protagonizó una épica remontada para vencer a la ‘Celeste’ en Lima, puesto que tras finalizar la primera etapa caía por 2-0 y exhibiendo un opaco cometido.

A la hora de comentar el notable triunfo sobre los ‘charrúas’, Caputto declaró que “dimos vuelta el partido con una contundencia increíble. Hace 34 años que no se le ganaba a Uruguay en un Sudamericano e hicimos lo que hace este equipo, romper paradigmas”.

“No es fácil hablar en este momento. La emoción es muy grande. En este tipo de torneos, y más en el hexagonal, hay que administrar las emociones. El cuerpo técnico en general tuvo que inyectarle mucha energía positiva a los muchachos”, agregó.

En el análisis de la brega, el otrora arquero señaló que “ante Uruguay nos encontramos con esos pequeños fantasmas que existen el fútbol. Pero en el entretiempo hablamos profundo, generamos un feed back en conjunto y sacamos el partido adelante. Estoy muy orgulloso de los jugadores, que fueron capaces de asimilar y reflexionar, algo que a esta edad es muy difícil”.

Incluso, el estratega nacional indicó que la charla sostenida en el entretiempo con sus jugadores dio el efecto esperado, ya que en el complemento se soltaron, afirmaron sus líneas y marcaron cuatro goles.

“Nos dimos cuenta de que éramos capaces. Esa reflexión que se generó en el entretiempo la voy a tener siempre en el recuerdo. Ahí es donde ocurren las cosas importantes de la vida. Nos dimos cuenta de que podemos salir adelante después de cometer errores. El equipo siempre propuso, fue a buscar todos los partidos. Fuimos contundentes e hicimos los goles en los momentos importantes”, expresó.

A falta de un solo partido por disputar, la ‘Roja’ llegó a nueve unidades, se mantuvo en el segundo lugar de la tabla, tras Argentina (10), y timbró su boleto a la próxima Copa del Mundo, a jugarse en noviembre.