Barristas de Everton obligaron a suspender el partido ante Universidad Católica, que se jugaba en el estadio Sausalito de Viña del Mar y era válido por la Liga de Primera.
Ya sobre el final del partido, un número indeterminado de sujetos -la mayoría con el rostro cubierto- saltó al césped y obligó a poner fin anticipado al encuentro donde la UC goleaba 3-0.
Fueron minutos de tensión. Los barristas irrumpieron desde la Galería Cerro (sector local) y llegaron a escasos metros de jugadores de ambos elencos.
En la cancha del recinto viñamarino se vieron enfrentamientos con guardias y carabineros, los que finalmente sacaron a los invasores del terreno de juego.
Trascartón, el árbitro del encuentro anunció que el partido no se reanudaría y terminaba con el 3-0 a favor de la visita.
Vale mencionar que, con la derrota, Everton sigue duodécimo con 22 puntos pero ahora a solo 2 de la zona de descenso.
Lo anterior, sumado al alto precio de las entradas para este partido y otras cuestionadas decisiones dirigenciales, colmaron la paciencia la barra ‘ruletera’.