Ya cumplió dos años retirado, pero su imagen sigue ligada al fútbol. Jorge ‘Kike’ Acuña está al mando del equipo Sub 17 de Unión de San Felipe, en lo que él considera un sueño.

En entrevista con AS, el otrora jugador de La Roja y Universidad Católica reflexionó sobre su nueva labor en el balompié, asegurando que está feliz en el cuadro del Aconcagua.

“Para mí no hay nada más lindo que el fútbol, se extraña muchísimo cuando estás afuera y lo único cerca para estar dentro de una cancha es ser técnico. A parte que me gusta mucho, me gusta el contacto que tengo actualmente con los niños y obviamente quiero dirigir un equipo de adultos”, aseguró Acuña.

El ‘Kike’ lleva un mes a cargo de sus pupilos, de quienes destacó que “ha sido súper buena, al principio estaba nervioso y ansioso, pero ha sido buena. Lo más importante es el trato con los jugadores, trato de ser cariñoso con ellos, algo que me han retribuido con un respeto absoluto hacia mí. Eso es lo que a uno lo pone contento”.

Sin embargo, el exjugador recalcó en que tendrá mano dura. “El jugador que se porte mal conmigo, no jugará. Es así de simple. A parte no me van a poder engañar, ya que me daré cuenta inmediatamente. Obviamente en mi equipo debe haber mucha disciplina, debe existir un respeto mutuo entre el jugador y conmigo”, sostuvo el exjugador.

También, el ‘Kike’ aseguró que hay dos elencos con los que sueña dirigir. “Quiero empezar con San Felipe y en un futuro me gustaría pasar por la UC y llegar a La Roja. Sé que lo voy a lograr, así como a los 11 años salí de mi casa con un objetivo súper claro que cumplí siendo muy pequeño. Ahora estoy convencido y mentalizado que voy a lograr todo lo que me proponga como técnico, para mí no hay imposibles”, sentenció Acuña.

Finalmente, el otrora seleccionado nacional aseguró que ya tiene listo un invitado de lujo para su partido de despedida. “Hablé con Robin Van Persie porque tengo pensado hacer mi despedida del fútbol, ojalá en San Carlos de Apoquindo, y él es uno de mis invitados. Entonces lo conversé con él y aceptó venir a Chile para ese día”.