Las próximas elecciones de directorio de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) siguen sumando capítulos, cuando restan 20 días para inscribir oficialmente las listas que participarán del proceso que elegirá al sucesor de Arturo Salah en la presidencia.

En los últimos días se registró la confirmación de que Harold Mayne-Nicholls se postulará para volver al cargo que ocupó entre 2007 y 2011, mientras que Pablo Milad tomó el camino contrario y continuará como Intendente de la región del Maule, desechando la posibilidad de ser el líder de la lista del grupo que actualmente es opositor a Salah.

Pero existía otra opción que daba vueltas para ser candidato a la presidencia. Se trata de Francisco Ceresuela, expresidente de Unión Española que era la alternativa de varios de los equipos más cercanos a Salah, pero que también lograba concitar apoyo en instituciones del ‘otro bando’, lo que lo transformaba en un fuerte nombre para llegar a la sillón de Quilín.

Pero Ceresuela había pedido plazo hasta la noche del martes para meditar y decidir si aceptaba la postulación, la que finalmente rechazó, aduciendo estar “en medio de grandes desafíos personales y profesionales, que me impiden poner toda mi energía en esta gran propuesta”, en un comunicado que difundió.

“Todos sabemos que estas oportunidades a veces no se repiten, pero probablemente mi gran valor, es ser un profesional comprometido y apasionado con lo que se compromete (…) El fútbol es una pasión que me ha acompañado toda la vida. Por eso, a pesar de plantear mis objeciones desde el mismo momento que me lo hicieron saber, a modo de agradecimiento y respeto estuve dispuesto al menos a evaluar la posibilidad”, explicó.

Ceresuela aparecía como un candidato de consenso, lo que no bastó para convencerlo de que encabezara la lista. Por ello, Mayne-Nicholls se mantiene como el único candidato para llegar a fines de noviembre, cuando se desarrollen las elecciones.