El portero Wayne Shaw alcanzó notoriedad mundial tras ser sorprendido comiéndose un sándwich en pleno partido, mientras su equipo, el Sutton, se media ante el Arsenal por los cuartos de final de la FA Cup.
De hecho, cuando estalló el asunto, su club lo despidió, situación que generó que el meta cayera en una profunda depresión.
“Mi mundo cayó. Era un mar de lágrimas. Nunca había sido despedido en mi vida. Está en mi mente todos los días y probablemente estará durante mucho tiempo. He pasado por la depresión. No he dormido bien, pude sentir que me estaba estresando. Todavía tengo ese nudo en mi estómago”, dijo.
Esa situación está siendo investigada, ya que la casa de apuestas ‘Sun Bets’, propiedad del diario The Sun, había ofrecido una ganancia de 8-1 a quien apostara a que el portero se comería un bocadillo en directo.
“Nadie me pidió mi versión de la historia. La reacción del club fue que no querían tener nada que ver con eso. No gané ningún dinero y mis amigos no han ganado ningún dinero. Probablemente me dejé llevar”, cerró.