La irrupción de Aníbal Mosa en el mundo Colo Colo a partir de 2010 no ha pasado desapercibida para nadie en el fútbol nacional. El directivo genera dispares opiniones, pero siempre se las arregla para estar en la agenda deportiva, política o económica.

Sin embargo, su historia de vida es poco conocida por los hinchas que condenan o felicitan a uno de los máximos accionistas de Colo Colo.

El expresidente de Blanco y Negro S.A. llegó de Siria a los 6 años de edad junto a su familia, motivados por un tío y con la decisión de su padre, que juntó dinero para poder viajar hasta Chile. Mosa recuerda perfectamente su vida en el Medio Oriente

Nosotros eramos pobres, aunque debo decir que nunca vivimos carencias, yo fui feliz. La casa tenía un piso, pero el techo también se ocupaba para dormir. Se hacía mucha vida en la calle”, explica el dirigente, en entrevista con la Revista Sábado de El Mercurio.

Pese a que una vez que se establecieron en Chile, Aníbal con sus hermanos fueron inscritos en la Escuela 10 de Frutillar Alto, el expresidente ‘albo’ se negó a seguir estudiando cuando tenía 13 años, reclamando que quería trabajar con su padre.

“Cuando se lo dije, se dio unas vueltas y me trajo una escoba. Me dijo ‘Ya, ¡Empieza!’. Le pregunté qué hacía con la escoba. ‘Anda a barrer el negocio, la calle, la casa, y cuando termines, ¡vuelve!’. Y así partí, barriendo”, recuerda. Nunca más volvió al colegio.

Luego, en 1984, su madre murió en un accidente automovilístico en Miami, cuando con su padre salieron de vacaciones por primera vez. “Alguien los chocó por atrás. Mi mamá se desnucó en el instante“, narra Aníbal Mosa.

Dos años después, su padre también murió en un accidente automovilístico. El directivo de Blanco y Negro cuenta que su familia vivió momentos difíciles.

“Tuvimos que empastillarnos, ver doctores, terapeutas, inyecciones: fue terrible. Imagínate que cuando muere nuestro papá todavía no asimilábamos que estaba muerta la mamá”, explica.

A partir de ahí, Aníbal Mosa recuerda que la vida familiar tuvo un punto de quiebre. Por su parte, el comerciante incursionó en varios negocios, como la pesca de la merluza o la fiebre del loco, hasta estos días, que esta inmerso en varios rubros, entre ellos, Blanco y Negro S.A., donde desde el 2014 forma parte de los máximos accionistas de la institución.