La largamente esperada miniserie documental sobre los legendarios Chicago Bulls de Michael Jordan, que dominaron la NBA en la década de 1990, ha sido terminada con anticipación para poder ofrecerla en abril a los aficionados de todo el mundo, anunció el martes la cadena ESPN.

El documental “The Last Dance” (El Último Baile), que consta de 10 episodios, iba a ser originalmente lanzado a principios de junio, coincidiendo con el inicio de las finales de la NBA.

Pero ante el impacto de la pandemia de COVID-19, que ha dejado a los aficionados sin partidos de la NBA y de ninguna de las otras grandes ligas y torneos deportivos, ESPN decidió adelantar el estreno al 19 de abril.

Es por eso que los fanáticos del baloncesto están más que ansiosos por conocer nuevos detalles sobre la vida del que ha sido considerado el mejor jugador de básquetbol de todos los tiempos.

De hecho, hay una anécdota que se dará a conocer que muestra una faceta totalmente diferente a la que se conoce actualmente de Jordan.

Resulta que cuando el seis veces campeón de la NBA estaba en su momento cúlmine, en la década de 1990, tuvo episodios polémicos que pudieron catapultar su carrera.

Resulta que tras el primer campeonato de los Bulls en 1991, el exbasquetbolista no asistió a tirar canastas con sus compañeros a la Casa Blanca con el George H.W. Bush.

En aquel momento no se dio ninguna explicación acerca de la misteriosa ausencia de la estrella. Sin embargo, más tarde se dio a conocer que había programado con anterioridad unas vacaciones familiares.

El asunto es que Jordan había ido a jugar golf (y apostando) con James “Slim” Bouler, un traficante de drogas que posteriormente sería condenado por lavado de dinero.

Tras conocerse esta situación el gobierno federal tomó cartas en el asunto y confiscó un cheque que le emitió Jordan a Bouler por 57.000 dólares. Al inicio, Jordan había informado que el cheque era un préstamo, pero más tarde testificó en un juicio y dijo que el dinero era por lo que había perdido jugando al golf con Bouler.

En conversación con el New York Times, Jordan confesó que dijo eso para poder evitar la vergüenza de ser vinculado con un traficante de drogas.

“No fue presentado como un préstamo en absoluto”, dijo.

“Esa fue mi reacción inmediata ante los medios de comunicación después de un partido para evitar la vergüenza y el malestar, y que me vincularan al mundo de las apuestas”, cerró.