Russell Westbrook no quiso reaccionar en contra de un aficionado que le insultó en medio del partido entre 76ers y Oklahoma City jugado en Philadelphia por la NBA.

Lo sabía pues la última vez que lo hizo le costó muy caro, literalmente, ya que debió cancelar una multa de 25 mil dólares tras el incidente. Esta vez contó hasta diez y prefirió solucionar todo con el árbitro, a quien le preguntó si dicho fanático podía pasar a llevarle de esa forma.

La respuesta fue en beneficio del base estrella de los Thunder, pues el juez avisó a los guardias de seguridad y el enardecido seguidor tuvo que abandonar el West Fargo Arena.

“No quise decirle nada“, explicó el deportista de 27 años, quien por cierto se matriculó con 32 puntos y capturó 8 rebotes en el compromiso.

El resultado final fue una victoria por 103 a 97 para el conjunto de Westbrook, quien de seguro no olvidará el primer cuarto del partido, no solo por el esfuerzo físico realizado claro está.


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