El brasileño Wanderson Sousa quiso hacer un gesto de amor pero las cosas no le salieron como esperaba.

En el duelo entre el Ludogorets y el Slavia Sofia en Bulgaria, el jugador marcó un tanto (minuto 79) para su equipo y quiso festejarlo con todo.

El delantero corrió fuera del campo de juego y se fue hacia la tribuna donde se encontraba su novia. Allí, ambos se dieron un beso y celebraron el tanto.

Sin embargo, lo que no sabía el brasileño es que el árbitro había anulado el gol por fuera de juego y el partido seguía su curso.

Confundido, el brasileño ingresó al campo asumiendo que el gol había sido anulado. El momento se volvió viral en redes sociales.