Una insólita situación ocurrió en el duelo entre CD Onda y CD Castellón en la jornada 33 de la Liga Nacional de juveniles de España.

Cuando corrían 10 minutos de iniciado el encuentro, el árbitro debió suspender el encuentro debido al fuerte olor a marihuana que venía desde una de las galerías del estadio.

¿Los culpables? cuatro hinchas que se encontraban fumando como si el mundo se fuese a acabar.

Tras percatarse de la situación, el juez principal llamó a la Guardia Civil para que sacara a estos jóvenes del recinto deportivo, informó golsmedia.

El entrenador del Onda relató que “estábamos jugando el partido y había 4 o 5 jóvenes que se estaban fumando un porro, por lo que el árbitro llamó al delegado para que avisara a la Guardia Civil”.

Después de unos minutos el cotejo se volvió a reanudar.