El Centro Cultural Estación Mapocho inaugurará el sábado 6 de diciembre la exposición “Hebras y Muros”, que reúne el trabajo textil más reciente de Alejandro “Mono” González, Premio Nacional de Artes Plásticas 2025 y figura clave del muralismo latinoamericano.
La muestra estará abierta al público entre el 5 y el 31 de diciembre, martes a domingo de 11:00 a 18:00 horas con entrada liberada, y desplegará tres cuerpos de obra que dialogan entre memoria, identidad y resiliencia, utilizando el tejido como soporte poético y político.
Así, la obra traslada al lenguaje textil las preocupaciones sociales que han marcado las casi seis décadas de trayectoria del artista. La exposición que se dispondrá en la Estación Mapocho destaca cómo González cruza el muralismo con prácticas artesanales contemporáneas, incorporando piezas desarrolladas en colaboración con talleres y comunidades.
1. “Todos los Fuegos el Fuego” – Mural Textil (Galería Bicentenario)
De 15 x 3 metros, esta pieza monumental, dirigida por Mono González y realizada junto al Taller Textil Malfatti, toma su título de Julio Cortázar para explorar la dualidad del fuego como fuerza creativa y destructiva por igual.
El mural, concebido como obra colaborativa, busca así traducir la tensión del conflicto en un diseño simbólico donde la suavidad del telar equilibra la intensidad conceptual. Tras su exhibición, la obra será instalada de manera permanente en la Biblioteca Nacional, subrayando su carácter patrimonial.
2. Tapices “50 Años del Golpe” – 10 piezas (Galería Bicentenario)
Realizados también por el Taller Malfatti y financiados por FONDART 2023, estos tapices constituyen un homenaje sensible a las víctimas de la dictadura, hilando nuestra historia con los acontecimientos recientes del país.
La serie busca confrontar al espectador con una estética profundamente vinculada al muralismo de González: colores vibrantes, figuras populares y un lenguaje que dignifica lo colectivo y lo humano.
3. Serie “Banderas” – Patchwork (Sala Lily Garafulic)
Este conjunto de banderas fue creado en colaboración con el taller textil de Francesca, en San Potito Sannitico (Nápoles), durante la pandemia de COVID-19. Confeccionadas por una comunidad de mujeres, las piezas emplean patchwork (retacería) y seda para abordar temas de resiliencia, fragmentación y reconstrucción.
Las banderas buscan representar símbolos de identidad y territorio, recomponiendo fragmentos, materiales y emocionales, en un tiempo marcado por la crisis global.
Una invitación al reencuentro
Con estas obras, “Hebras y Muros” invita a desacelerar y a reencontrarse con lo humano en esta era digital, con trabajo hecho a mano por comunidades de artistas. Estos tres capítulos textiles buscan además exponer la amplitud del trabajo de González, quien ha nutrido la cultura visual de Chile desde los años 60, volviéndose además una figura de alcance internacional.
Su obra, marcada por su rol fundador en la Brigada Ramona Parra y por murales emblemáticos como los de Parque Bustamante y El Primer Gol del Pueblo Chileno, realizado junto a Roberto Matta en 1971, ha influido a generaciones y llevado la gráfica chilena a sindicatos y movimientos sociales en Europa.