Nueva Zelanda entró en la historia del rugby al lograr su segundo título mundial consecutivo, algo que no había logrado nadie antes, gracias a su victoria este sábado ante Australia en Twickenham (34-17), con 19 puntos de su apertura Dan Carter, siendo además el primer equipo que tiene tres coronas en su palmarés.
La generación dorada de Dan Carter y Richie McCaw, que se despedían en este partido de la camiseta de los All Blacks, aunque el capitán todavía duda, tiene asegurado un lugar en la leyenda de este deporte, con dos títulos mundiales seguidos y el primero que su país obtenía fuera de casa, tras haber ganado en 1987 y 2011 en Auckland.
Pese a un bache al inicio de la segunda parte, Nueva Zelanda fue muy superior a su rival en todos los aspectos del juego, con tres tries anotados por Nehe Milner Skudder (39), Ma’a Nonu (42) y Beauden Barrett (79) y el pie de Dan Carter, con cuatro penales, dos conversiones y un drop, que dejó en 1.598 el récord mundial de puntos en partidos internacionales tras su 112 y último partido con los All Blacks.
“Hemos jugado un rugby muy bueno aquí. Estuvimos un poco perdidos en el segundo tiempo, pero mantuvimos la compostura. Volvemos fuertes a casa, como hemos estado estos cuatro años”, afirmó el capitán McCaw.
“Dijimos en 2011 tras ganar el primer Mundial, que íbamos por el segundo”, dijo McCaw.
El drop de Carter en el minuto 70, que era el 24-17, cuando Australia se había acercado en el marcador a 21-17, quitó presión a los All Blacks en los últimos minutos y el apertura de 33 años tuvo el protagonismo que le faltó en la final del Mundial-2011, que no pudo jugar al sufrir una lesión, que le apartó del torneo en la primera fase.
“Me siento agradecido y afortunado por estar aquí después de lo que me pasó hace cuatro años. Estoy muy orgulloso de este equipo. Ganar dos Mundiales seguidos en un sueño hecho realidad. Tratamos de hacer cosas que nadie hizo antes. Es una sensación especial formar parte de este equipo”, declaró Carter.
Los All Blacks, para muchos el mejor equipo de la historia, llegaron a colocarse con una ventaja de 21-3, para sufrir en la última media hora, tras una expulsión temporal de su fullback Ben Smith (52).
Después de esa expulsión y con diez minutos en inferioridad numérica para los All Blacks, Australia redujo diferencias con dos tries de David Pocock (53) y Tevita Kuridrani (64), colocándose a cuatro puntos.
Pie de Carter
El pie de Carter puso después tranquilidad hasta que llegó el último try neozelandés del wing Beauden Barrett en el último minuto.
Pese a su aplastante ocupación del terreno y posesión de la pelota antes del descanso, Nueva Zelanda solo pudo despegarse en el marcador en el último minuto de la primera parte, con un try del wing Nehe Milner Skudder.
Ese try y once puntos con el pie de Dan Carter permitieron a los All Blacks, que superaban en todos los apartados del juego a su rival, llegar con una merecida ventaja de 16-3 al descanso.
La férrea defensa australiana, la misma que brilló impidiendo hacer tries a Gales con dos hombres menos, había aguantado las acometidas neozelandesas hasta ese primer try de Milner Skudder.
Hasta ese momento, los All Blacks solo habían podido marcar puntos con tres penales de Carter, que sumó dos más con la conversión.
Con una desventaja de trece puntos tras la primera mitad, Australia intentó arriesgar más en la segunda, y propició una carrera del centro Ma’a Nonu para apoyar el segundo try neozelandés, poco después de la reanudación (42).
Pese al primer fallo con el pie de Carter, en la conversión, el partido parecía sentenciado (21-3).
Nueva Zelanda se complicó el partido cuando se quedó con un jugador menos durante diez minutos en el 52, al recibir una tarjeta amarilla Ben Smith por un tackle antirreglamentario.
En ese espacio de tiempo, los Wallabies recortaron diferencias con un try del tercera línea David Pocock (53) y conversión de Foley (21-10).
En el segundo tiempo, los Wallabies empezaron a tener más el balón y lograron se segundo try por medio del centro Tevita Kuridrani (64), que con la conversión de Foley, puso emoción en el último cuarto de hora de partido (21-17), hasta que llegó el drop tranquilizador de Carter.
Cinco puntos más de Carter y el try en la última jugada de Barrett hicieron justicia al final para Nueva Zelanda.