En el fútbol existen ciertos trucos para demorar el juego en caso de tener alguna ventaja en el marcador, como por ejemplo retener el balón cierto tiempo o simplemente tirarse al césped aludiendo una lesión “inexistente”.

Pero lo que realizó el uruguayo Matías Alonso en el duelo entre su escuadra, el Atlético Juventud de Las Piedras ante Real Potosí, supera con creces las típicas mañas que se han visto en el balompié mundial.

La situación ocurrió en el partido de vuelta en la primera fase de la Copa Sudamericana. Juventud había vencido por 4-1 en el primer encuentro y en el duelo de vuelta caía 2-0, resultado que debían aguantar, y con uno menos, para poder quedarse con la llave.

Fue ahí cuando el delantero charrúa simuló una falta y se lanzó al pasto aludiendo mucho dolor, por lo que la camilla junto al carrito debieron entrar al campo de juego.

Los asistentes tomaron al adolorido jugador y lo acomodaron para levantar a Alonso, pero el atacante, en un acto de desesperación, no encontró mejor manera de hacer tiempo que tirarse intencionalmente de la camilla hacia el césped, ganándose las críticas de todo el estadio.

Para tomar cuidado, los asistentes debieron sujetar al delantero para evitar una nueva caída, y así se lo llevaron fuera de la cancha.

Una “ridícula” pero efectiva simulación la cual finalmente dio resultados, ya que su equipo pudo acceder a la siguiente ronda de la Sudamericana.

https://youtu.be/of5i5EwQXEM