“Los rudos también tienen corazón”. Con esta frase podría encerrarse la actitud del defensor brasileño del PSG, Thiago Silva, en la previa del duelo del último fin de semana frente al Lyon por la Ligue-1.

Y es que el zaguero, reconocido por sus ásperas entradas a los delanteros rivales, tuvo un tierno gesto con el niño que lo acompañó a ingresar el terreno de juego.

Resulta que la baja temperatura en el estadio Gerland le jugó una mala pasada al pequeño compañero de Silva, quien tras realizar evidentes muecas de sentir frío recibió una rápida caricia del futbolista.

Pero no fue todo. Cuando los jugadores estaban alineados y preparándose para saludar al juez del encuentro, el zaguero tuvo un notable gesto: envolvió con su polerón al menor.

Este hecho fue de inmediato replicado en las Redes Sociales donde la mayoría de los hinchas expresó “respeto” y “admiración” por el ex capitán de la selección brasileña de fútbol.

A continuación, te dejamos con las imágenes del citado momento.