Anotando su mejor parcial de la semana, el velero chileno “Santander”, tripulado por Nadja Horwitz y Carmina Malsch, concluyó en el 12° lugar de la clase 470 en la Copa Brasil, evento de embarcaciones olímpicas que congregó a más de un centenar de deportistas de 24 países en la bahía de Guanabara, la misma cancha donde se desarrollarán los Juegos Olímpicos Rio 2016.

Las navegantes de la Cofradía Náutica del Pacífico y seleccionadas de Fedevela, quienes actualmente ocupan el 49º lugar del Ranking Mundial de su especialidad, registraron anotaron un 8º lugar (su mejor parcial) y un 11º en las regatas de la clausura, con lo que acumularon 96 puntos negativos en diez pruebas (un descarte).

“Tuvimos muy poco viento; no más de siete nudos. En la primera regata veníamos muy bien, pero al final tuvimos algunas complicaciones y perdimos posiciones, pero volvimos a confirmar que podemos estar adelante en la flota y eso nos deja muy conformes”, dijo la proel Carmina Malsch.

“Enfrentando a las mejores del mundo nos obligamos a exigirnos al máximo, y eso es muy provechoso para nuestra campaña. Hemos notado varios avances y nos llevamos hartas lecciones muy valiosas”, agregó la timonel, Nadja Horwitz, quien compitió toda la semana con una lesión en el dedo índice de la mano derecha.

Las tripulantes del 470 “Santander”, que aspiran a convertirse en la primera dupla femenina de Chile en clasificar a la competencia de vela de los Juegos Olímpicos, pasarán las fiestas de fin de año en nuestro país y en enero volverán a aguas internacionales, con dos torneos en Miami, Estados Unidos. El Campeonato Norteamericano de su especialidad,
del 17 al 19 de enero; y el Miami OCR, del 26 al 31 del mismo mes.

El 470 (“cuatro setenta”) es un barco de vela para dos tripulantes (timonel y proel), diseñado en 1963 por el francés André Cornu. Construido desde sus inicios en fibra de vidrio, se extendió rápidamente por todo el mundo y en 1969 ya era una clase náutica internacional reconocida oficialmente. Es clase olímpica para hombres desde 1976 y en 1988 pasó a serlo para las mujeres. El nombre de la clase y del barco provienen de su eslora (largo del casco), que mide 4
metros y 70 centímetros. Es un barco veloz y ligero, para navegación relativamente avanzada, por poseer un diseño y aparejo muy técnico.