El partido de ayer entre San Marcos de Arica y Deportes Iquique dejó un sabor amargo en el fútbol criollo. Y es que luego que fuera suspendido el encuentro por el árbitro Julio Bascuñan, al notar nuevamente insultos racistas en contra del venezolano Emilio Rentería, se vino a la mente un episodio que ocurrió hace ya 11 años, teniendo como protagonista al ex jugador de la “U”, Faustino Asprilla.
El hecho, que comenzó en Rancagua y se repitió en Arica, fue duramente condenado por la ANFP, quien emitió un comunicado lamentando lo sucedido.
“El Directorio acordó hoy mismo (sábado 22 de noviembre) rechazar y condenar de la manera más enérgica los incidentes ocurridos esta tarde en el partido entre los clubes San Marcos de Arica y Deportes Iquique que conllevó la suspensión del encuentro”, dice el comunicado.
Pero el máximo ente del fútbol nacional fue enfático al señalar en la carta que investigarán y analizarán el lamentable caso de racismo en contra del venezolano, para ir en busca de los responsables, y sancionarlos.
“Se instruyó a Gerencia de Competiciones para que solicite inmediatamente los informes del árbitro, del veedor de la ANFP y del jefe de seguridad del equipo dueño de casa (Arica) para analizarlos y definir las acciones que deberá seguir la Secretaría Ejecutiva ante el Tribunal Autónomo de Disciplina para hacer efectiva las responsabilidades reglamentarias que procedan”, sentenció.