Boca Juniors le ganó al paraguayo Cerro Porteño por 1-0, en un partido de ida por los cuartos de final de la Copa Sudamericana 2014, disputado la noche del jueves en el estadio La Bombonera en Buenos Aires.
Con este resultado, a Boca le alcanzará con un empate o con una caída por un margen de un gol, siempre que logre anotar por lo menos un tanto en el desquite que se jugará el 6 de noviembre en el estadio Defensores del Chaco en Asunción.
El ganador de esta llave se encontrará en las semifinales con el vencedor de la serie entre los argentinos River Plate y Estudiantes, con ventaja parcial de 2-1 para los ‘millonarios’.
En la primera parte, Boca trató de quedarse desde el comienzo con el papel protagónico, algo que consiguió de a poco, frente a un conjunto guaraní que eligió un planteo ligeramente defensivo, con la misión de cerrarle los caminos al local, y tratar de jugar de contraataque, con el español Güiza como pivote.
De todos modos, a Boca le costó generar situaciones, con un dominio que se hizo estéril en la medida que la tenencia de la pelota no se tradujo en situaciones de gol, ya que el equipo auriazul abusó del traslado, y no tuvo ni la sorpresa ni las variantes necesarias para encontrar un resquicio en la trama guaraní.
Por el contrario, cuando se quedó sin paciencia, Boca empezó a tirar pelotazos improductivos, de fácil resolución para Mareco y Valdez, los centrales de Cerro Porteño.
En ese primer tiempo, lo mejor de Boca estuvo en un derechazo alto de Meli, y casi en el epílogo, dos remates de media distancia del chileno Fuenzalida y de Meli, pero que no lograron sorprender a Barreto, mientras que el ‘Ciclón’ paraguayo casi no pisó el área local, y sólo remató una vez, cuando Oscar Romero probó desde muy lejos, completamente desviado.
En la segunda parte Boca prolongó el control, pero le costaba entrar, más allá de asegurarse la tenencia con un muy buen trabajo del juvenil Cubas en la mitad de la cancha.
Recién a los 70 minutos el local volvió a pisar el acelerador y a empujar sobre la resistencia guaraní, y tuvo una gran ocasión en una buena acción individual de Meli, pero Barreto salvó su valla ante la definición de Colazo; enseguida, Chávez intentó con un zurdazo desviado.
La apertura llegó con un desborde por la izquierda de Colazo, que buscó al ingresado Gigliotti, que desató el festejo después de un remate que terminó de introducirse en la red luego de un desvío en Mareco.
Quedaba poco tiempo, pero igualmente Cerro Porteño tuvo una excelente ocasión para igualar y llevarse un gol valiosísimo para la revancha, pero Gamarra dilapidó una oportunidad de oro, ya que luego de eludir al arquero Orion, se resbaló cuando estaba solo frente al arco desguarnecido.
Con mucho sufrimiento, Boca se quedó con un éxito por un margen escaso, que está lejos de garantizarle la clasificación, pero irá a Asunción con la valla en cero, y le pasó la responsabilidad a un Cerro Porteño que estará forzado a conseguir un triunfo contundente.