La presión aumenta sobre el seleccionador Ewen McKenzie tras la derrota de los Wallabies ante Argentina el sábado en Mendoza en el Cuatro Naciones (21-17), un partido calificado por la prensa australiana como un “desastre absoluto”.

Fue la primera victoria de Argentina en las tres ediciones en las que ha participado en el torneo que reúne a los cuatro mejores equipos del hemisferio sur (junto a Nueva Zelanda y Sudáfrica).

“Los Wallabies fueron un equipo sin timón y distraído que mereció sufrir la vergüenza de ser la primera víctima de Argentina en el Rugby Championship”, escribió el veterano especialista de rugby Greg Growden en el sitio web de ESPN Scrum.

“Los Pumas ganaron la batalla de la delantera, por adelantado, feminizando a veces al scrum australiano y aún así fueron capaces de dominar la posesión y territorio”, añadió.

“Ante un equipo mejor (Nueva Zelanda, Sudáfrica e incluso Inglaterra) los Wallabies habían perdido de al menos 20 puntos”, concluyó.

Growden considera que la posición de McKenzie como seleccionador está seriamente en cuestión, después de que el equipo haya sufrido una de las derrotas más inexplicables de los últimos años.

“McKenzie tiene que aceptar gran parte de la vergüenza por el fiasco de Mendoza. Su récord en el Rugby Championship es decepcionante”, criticó el experto.

“El balance de McKenzie (52%) con 11 victorias en 21 test es el más bajo de un entrenador australiano en la época profesional, peor que Robbie Deans (58%), John Connolly (64%), Eddie Jones (57%), Rod Macqueen (59%) y Greg Smith (63%)”, argumentó.

El diario Sydney Morning Herald aseguró que o McKenzie soluciona rápido los problemas de los Wallabies “o las cosas se pondrán feas”.

“La luna de miel acabó hace tiempo para McKenzie”, después de que la elección del exjugador en junio de 2013 fuese aclamada por los aficionados al rugby australiano.

Los Wallabies se enfrentarán a los All Blacks en Brisbane el próximo 18 de octubre.