Lituania y Estados Unidos definen este jueves a partir de las 16:00 horas al primer finalista del Mundial de Básquetbol que se disputa en España.

En el papel, Estados Unidos asoma como favorito, pero Lituania apuesta por dar un nuevo batacazo luego que la jornada de ayer Francia eliminara al local y favorito para la final, España.

Históricamente, Lituania ha sido uno de los rivales que siempre le ha puesto las cosas más complicadas a los diferentes equipos estadounidenses que se han sucedido en los últimos 22 años, desde que el país báltico se independizó y que coincidió con la participación de las estrellas de la NBA en los torneos internacionales.

El primer enfrentamiento fue en los Juegos Olímpicos de Barcelona-1992 y fue en las semifinales, en las que el auténtico Dream Team, venció por 127-76.

Cuatro años después, en Atlanta, volvieron a medirse y la victoria fue de nuevo norteamericana, por 104-82.

Después de esos dos enfrentamientos, han vuelto a jugar en siete ocasiones, en Juegos Olímpicos o Mundiales, y la diferencia en el marcador ha sido siempre inferior a los 10 puntos, salvo en otro caso, en semifinales del Mundial de Turquía-2010, cuando el resultado final fue de 89-74 a favor de los norteamericanos.

Lituania, incluso, ha sido capaz de ganar dos veces a Estados Unidos: en la primera fase del Mundial-1998 en Grecia (84-82) y en la fase de grupos de los Juegos de Atenas-2004 (94-90).

El equipo europeo tiene también en este Mundial armas para hacer daño a los estadounidenses. Cuentan con un potente juego interior, con Jonas Valanciunas, Donatas Motiejunas (ambos jugadores de la NBA) y los hermanos Lavrinovic, Darjus y Kristof.

El primero, pivote de Toronto, es una de las piezas básicas del esquema del seleccionador Jonas Kazlauskas, y suma casi 13 puntos y 9 rebotes por partido, siendo la primera opción en el puesto de ‘center’.

Motiejunas, que jugó la última temporada en Houston, promedia 9 puntos y más de cuatro rechaces por encuentro.

Los hermanos Lavrinovic suelen empezar en el banco, pero tienen un papel decisivo, como demostró Darjus contra Turquía, con tres triples consecutivos que abrió el camino del triunfo a los lituanos. Kristof tiene más protagonismo en el juego defensivo.

Son cuatro torres, ninguno baja de los 2,10 metros, contra los que Estados Unidos opondrá su pareja estelar en este campeonato, Anthony Davis y Kenneth Faried, pero el técnico Mike Krzyzewski necesitará echar mano de otros efectivos para detener el juego interior lituano.

- Especialistas en triples -

Y el equipo europeo no solo destaca por su poder interior, sino también por su capacidad para anotar de tres. Jonas Maciulis, Martynas Pocius y Reinaldas Seibutis son auténticos especialistas que pueden destrozar una defensa rival en un buen día, como ocurrió en cuartos ante Turquía, partido en el que los lituanos anotaron 10 de 19 lanzamientos de tres puntos.

Los estadounidenses se encomendarán a su pareja de pivotes y a que su batería exterior tenga un buen día, cosa que no está siendo demasiado habitual en este torneo.

La lucha en defensa en ambos aros promete ser titánica y la mayor ventaja estadounidense puede estar, quizá, en su profundidad de banquillo.

En este campeonato ha habido varios partidos en los que los norteamericanos han acabado machacando al rival cuando comienzan las rotaciones, momentos en el que los Estados Unidos puede mantener el nivel de juego y los rivales no suelen encontrar respuestas tan efectivas en los banquillos.

La semifinal se disputará en el Palau Sant Jordi de Barcelona.