Le bastaron sólo 30 minutos para llevarse la primera gaviota, haciendo bailar a los miles de fans que llegaron a la Quinta Vergara para verlo.
El artista puertorriqueño se movió por todo el escenario, dejando en claro que no se guardaría nada.
Sin embargo, su presentación no estuvo exenta de algunos pequeños inconvenientes. Así lo dejó en claro en el tramo final de su show, cuando optó por quitarse sus zapatillas ya que se estaba resbalando.
Tras sacarse su calzado, Mora continuó con su concierto tal como estaba programado.
Este momento fue abordado por el propio músico una vez en el backstage, en donde explicó lo ocurrido.
“Una de las máquinas soltaba un poco de agua y cómo estaba brincando, me resbalaba”, comenzó señalando.
“En la última me las tuve que quitar para evitar un accidente”, agregó en conversación con Simón Oliveros y Natalia López.